miércoles, 14 de febrero de 2007


El agua puede abrirse camino
incluso a través de la piedra
y si se ve atrapada,
siempre busca un nuevo camino.
El agua es poderosa.
Puede arrasar la tierra,
apagar el fuego
e incluso destruir el hierro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero, ¿qué pasa cuando hay sequía?

DaNieLo dijo...

Cuando hay sequía hay que no perder la noción: el agua sigue siendo agua y sigue estando ahí, pero en otro estado. Sólo hay que esperar el momento de retorno a la tierra, para volver a fluir buscando el camino.

El peligro de intentar girar la cara cuando algo no es fácil es que cuando vuelves a mirar...te tiemblan las piernas.